AJ Styles, luchador de la WWE, se encuentra lidiando con una lesión de Lisfranc sufrida en octubre de 2024, lo que ha afectado considerablemente su desempeño y ha generado especulaciones sobre un posible final de su carrera. La lesión, un esguince de ligamentos en el mediopié, le está causando dificultades en su recuperación, tal como él mismo ha reconocido en redes sociales. Styles ha descartado que la lesión fuera parte de una trama argumental.
A pesar de las dificultades, Styles se mantiene activo en redes sociales, compartiendo actualizaciones sobre su terapia con agua fría. La lesión ha alimentado rumores sobre una posible historia de despedida para Styles, incluso se ha especulado sobre un combate final con John Cena, con quien tuvo enfrentamientos memorables en 2016. Esta posibilidad entusiasma a los fanáticos, ya que una lucha entre ambos sería un evento culminante para sus carreras.
Finalmente, Styles aclaró públicamente que la WWE no rechazó una propuesta de TNA para su inclusión en el Salón de la Fama de TNA, desmintiendo los rumores que circulaban al respecto. En resumen, la situación de Styles es incierta, con una lesión que requiere tiempo de recuperación y la especulación sobre un posible retiro que se entrelaza con la posibilidad de una última lucha épica.
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